Podrás creer que el león es el cautivo, pues nunca cesa el apetito por su presa. ¡Qué misterios hondos y profundos surcan la tierra y el firmamento! Y es que ahora que lo pienso, lo tuyo y lo mío no fue un error, solo el destino que junto la alegría con el dolor.Yo creí que conquistaba, creí que te lograba y tu cual sumisa presa , parecías lánguida y detenida como una semilla que no germina . Pero ¿que pasó? Con el tiempo en ti surgió otra cosa, y no propiamente una rosa sino una espina fría y calculadora que espero como el viento y la noche para apoderarse de la luz y de la paz, y lo convertiste todo en un gran engaño. Tú jugaste bien el papel, eras la mariposa inocente pero en el corazón vivía ya una serpiente.
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Pintura y Escrito:
Oscar Basurto Carbonell
Pensamientos para reflexionar
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